World, la empresa detrás de la red de identidad digital, vendió $135 millones en tokens WLD a inversores, incluidos Andreessen Horowitz y Bain Capital Crypto. Este financiamiento ayudará a expandir la Red Mundial en EE.UU. y a nivel global, centrándose en la infraestructura para World IDs a fin de autenticar a los usuarios en línea. A medida que avanza la inteligencia artificial, la necesidad de distinguir a los humanos de las máquinas se vuelve crítica. Más de 26 millones de personas han utilizado la Red Mundial, con 12,5 millones que han creado una World ID escaneando sus iris. La iniciativa planea lanzarse en ciudades importantes de EE.UU. como Atlanta y San Francisco, ofreciendo recompensas en tokens a los usuarios que prueben su identidad. Apoyada por importantes patrocinadores, World aspira a ser un protocolo autosostenible.