Los demócratas han criticado duramente la decisión del presidente Donald Trump de organizar una gala para los principales poseedores de su memecoin, exigiendo transparencia sobre los asistentes al evento. Los senadores Elizabeth Warren, Richard Blumenthal y Chris Murphy, así como el representante Sam Liccardo, entre otros, han acusado a Trump de poner en riesgo la seguridad nacional y de vender acceso a poderes extranjeros. Argumentan que, sin conocer a los asistentes, existe el riesgo de influencia indebida en las políticas estadounidenses. La gala se celebrará en el club de golf privado de Trump, con una entrada que, según se informa, cuesta entre $55,000 y $37.7 millones. El emprendedor cripto Justin Sun ha confirmado públicamente su asistencia, aunque muchos otros permanecen anónimos. A pesar de las demandas de transparencia, la Secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, aclaró que el evento no está vinculado a la Casa Blanca. Los críticos también expresan su preocupación por la participación de Trump en activos digitales, afirmando que es un medio para vender influencia a postores extranjeros. Maxine Waters ha presentado un proyecto de ley para combatir la 'corrupción cripto', que busca restringir la emisión de criptomonedas por parte de altos funcionarios. Mientras tanto, el token de TRUMP sigue superando al mercado de criptomonedas a pesar de la controversia.